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Una mala noticia, sin paliativos. Así calificaban ayer los representantes de los empresarios coruñeses la decisión de Vueling de suprimir las conexiones directas desde Alvedro con Sevilla, Ámsterdam y París para la temporada de invierno. El primero en pronunciarse fue el presidente de la Confederación de Empresarios de A Coruña, Antonio Fontenla, que incidió en que Alvedro «es una infraestructura estratégica para el desarrollo de la ciudad y de su área económica de influencia», por lo que la pérdida de rutas, además de afectar al turismo, también lo hará en el tejido empresarial, «que necesita disponer de un aeropuerto competitivo y capaz de dar respuesta a sus necesidades», sobre todo en lo referente a la exportación.
Fontenla remarcó que «los anuncios de inversiones millonarias en la mejora de Alvedro avalan la tesis de que esta infraestructura es decisiva no solo para el presente, sino para el futuro», por lo que entiende que tanto Xunta como Ayuntamiento deben hacer todos los esfuerzos para «mantener los enlaces y aumentarlos, mejorar las frecuencias y, en consecuencia, relanzar la actividad en dicha terminal».
Una tesis que comparten los presidentes de los hosteleros y los comerciantes, Francisco Canabal y Miguel Agromayor, respectivamente, que coinciden también en reclamar al Ayuntamiento un estudio de retorno del actual sistema de subvenciones a las aerolíneas para ver si su impacto en la actividad económica local corresponde con el desembolso que efectúa el gobierno local, que solo este año destinó 2,7 millones a convenios con aerolíneas. «Hay que hacer un estudio más profundo, porque el actual sistema se está haciendo por inercia y eso nunca funciona bien», explica Canabal, que duda de la rentabilidad real de los vuelos subvencionados porque, a su juicio, las promociones de la ciudad en destino no son suficientes como para atraer una masa crítica de turistas.
Por este motivo, el presidente de los hoteleros entiende que, dentro del estudio turístico, que deberá abordar el nuevo consorcio en el que estarán representados los empresarios, habrá que estudiar otros destinos, para lo que reclamó más apoyo de la Xunta ya que, entiende, que sus ayudas «no están equilibradas» entre los tres aeropuertos gallegos.
Mientras, el presidente de los comerciantes, Miguel Agromayor, lamentó la pérdida de turistas que conllevará la decisión de suprimir las tres rutas, ya que «no veo otra solución inmediata más para esta situación económica que la aportación que puedan traer los turistas». Agromayor, además de potenciar la oferta de Alvedro con nuevas rutas, cree imprescindible, sobre todo de cara al invierno, atraer parte de los turistas que visitan Santiago, instalando en la ciudad un punto turístico que publicite los atractivos de A Coruña, así como eliminar la duplicidad de rutas internacionales entre los tres aeropuertos gallegos.
Carril pide ayudas de la Xunta
Que no se solapen las rutas es también la reclamación del portavoz municipal del BNG. Argumenta Xosé Manuel Carril que «competir entre nós só beneficia o Saa Carneiro [el aeropuerto de Oporto], que xa capta máis de 600.000 viaxeiros galegos ao ano». El edil nacionalista, que apuntó que «os usuarios vense forzados a acudir a Porto ao carecermos de suficiente oferta en Galiza», reclamó el traspaso de competencias a Galicia para crear «un sistema aeroportuario galego».
«Hay que mantener y aumentar los enlaces y mejorar las frecuencias para relanzar la terminal»
Antonio Fontenla
«Hay que estudiar el retorno, porque el actual sistema se sigue por inercia y eso nunca funciona»
Francisco Canabal
«Las ayudas están bien para afianzar las líneas, pero no se puede subvencionar toda la vida»
Miguel Agromayor
«O futuro de Alvedro non pasa só polas axudas, que deberían correr a cargo da Xunta»
Xosé Manuel Carril
Fuente: La voz de Galicia
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