La decisión cayó como un jarro de agua fría sobre los astilleros que aún conservaban una mínima esperanza en que el comisario de Competencia, Joaquín Almunia, rectificase. Pero la Comisión Europea ha sido implacable: los inversores favorecidos por el tax lease español deberán devolver las bonificaciones fiscales que obtuvieron ilegalmente entre los años 2007 y 2011.
No cedió Almunia, pese a la insistencia de su homólogo italiano, Antonio Tajani, que defendió hasta el último momento el reintegro de las ayudas a partir del año 2009. Tampoco la presión del sector, autoridades españolas, sindicatos e inversores surtió efecto.
Aunque las peticiones de España no fueron satisfechas, la propuesta aprobada ayer por el Colegio de Comisarios amortigua el golpe que el borrador inicial pretendía infligir al sector, del que dependen 87.000 puestos de trabajo. La razón está en la letra pequeña de la resolución. LEER MÁS...
Fuente: La Voz de Galicia
|