Quince mil gallegos de entre 16 y 29 años buscan su primer trabajo y otros 68.600 están en paro
El paro se está cebando sobre todo con los más jóvenes. Encontrar trabajo es cada vez más difícil y eso no solo está frenando la emancipación juvenil sino que incluso está obligando a algunos de ellos a regresar a casa de sus padres. Según los últimos datos del Observatorio de la Juventud, 1.700 jóvenes gallegos de entre 16 y 29 años tuvieron que volver al domicilio paterno en el último año. Dos tercios de la población joven de la comunidad autónoma, más de 285.000 gallegos, sigue sin poder independizarse.
De los 396.000 jovenes de la comunidad autónoma solo 111.500 están emancipados, según los datos del tercer trimestre de la Encuesta de Población Activa (EPA) analizados por el Observatorio de la Juventud. Esta cifra es un 1,5 inferior a los gallegos de entre 16 y 29 años que estaban independizados en el mismo periodo del año pasado, lo que supone que casi dos mil han tenido que hacer las maletas y volver al hogar paterno.
A pesar de ello, la tasa de emancipación de Galicia, de un 28,1 por ciento, está entre las más altas del Estado. De hecho, es la quinta más elevada, tras Baleares (35,6 por ciento), Cataluña (29,1 por ciento), La Rioja (29,9) y Comunidad Valenciana (28,2 por ciento).
Entre los jóvenes que se independizan son mayoría las mujeres. El 32 por ciento de las chicas vive por su cuenta frente a solo el 23,8 por ciento de varones.
El principal obstáculo con el que se encuentran los jóvenes que quieren emanciparse es la dificultad de encontrar un empleo. En el último año se ha incrementado en un seis por ciento el número de jóvenes en paro. Si en 2010 eran 64.800, en el último trimestre han ascendido a 68.600. Pero además hay otros 15.000 gallegos de menos de 29 años que todavía están buscando su primer empleo, mil más que los que se contabilizaban hace un año.
En comparación con el resto del Estado, la tasa de paro juvenil en Galicia (del 28,5 por ciento) sigue siendo más baja que la media nacional. Sin embargo, la evolución está siendo más negativa que en el resto del Estado puesto que el incremento en el número de parados de entre 16 y 29 años durante el último año ha sido un 60 por ciento superior al registrado en España.
La tasa de empleo juvenil también se ha reducido en dos puntos en la comunidad autónoma en comparación con 2010. Y a esto hay que sumar que entre los jóvenes que consiguen un trabajo cada vez es mayor la precariedad de los contratos. Un ejemplo, la tasa de temporalidad entre los trabajadores jóvenes ha pasado del 53,7 por ciento al 54,4 por ciento en solo un año.
La mayoría de los jóvenes que trabajan son asalariados, un total de 151.600. Son menos los que se animan a emprender su propio negocio. Según los datos del Observatorio de la Juventud, los empresarios de menos de 29 años en la comunidad autónoma son apenas 20.000.
A la falta de empleo y los bajos salarios se une en ocasiones las dificultades para acceder a una vivienda. Según los estudios del Observatorio de la Juventud, la cantidad máxima que pueden pagar por una casa los jóvenes es de 350 euros de media.
FUENTE FARO DE VIGO
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